Un chapín desde Japón

Icon日本に住んでいるグアテマラ人

Festival de verano, Tsukiji 2008

El año pasado, en el mes de agosto, publiqué unos videos y unas fotos sobre el festival de verano en Tsukiji al que he asistido en varias ocasiones. Este año tambien pudé asistir y disfrutar (a pesar del gran calor) de algunos momentos. Como no olvidé llevar mi cámara, pude tomar algunas fotos y algunos videos. En esta ocasión voy a empezar con una compilación de los videos que tomé.



Entradas del año pasado:

Festival en Tsukiji

Festival en Tsukiji (2)

Festival de Verano, Tsukiji 2007

 
 

Aniversario

Como no quería romper el ritmo de la historia anterior, no me detuve ni para conmemorar el primer año de vida del blog. En realidad fueron muchas las cosas que deje de escribir durante casi todo el verano japonés, pero quizas mas adelante los temas van a ir apareciendo.

Por ahora, ¡feliz primer aniversario!, muchísimas gracias a todos los lectores (regulares y casuales). Ademas, quiero dejar un agradecimiento especial a todos los que se han tomado la molestía de comentar en el blog y a todos lo amigos blogueros que se han tomado la molestia de agregarme a su blogroll.

Por ahora no hay cambios en el blog, así que seguimos adelante.

Un saludo desde Tokio.

- Un chapín desde Japón

 
 

Emersión - ¡ Hasta luego Mikurajima !

En el camino de regreso, no me fue tan difícil dormir. Habia nadado, caminado en montañas y me habia desvelado; asi que al recostarme en mi asiento, me quede dormido un par de horas. El regreso fue tranquilo y despues de algunas horas regresamos a Takeshiba y casi una hora despues a casa para dormir de a de veras.

Antes de darle fin a la historia, quisiera dejar unos últimos apuntes.

Algunas recomendaciones (pueden ser de utilidad para el futuro viajero):
  • La temporada para nadar con delfines en Mikurajima es, aproximadamente, desde finales de abril o principios de mayo y corre hasta septiembre. La elección de la fecha para viajar es muy importante porque la tranquilidad del mar, la temperatura, la cantidad de turistas y disponibilidad de hospedaje esta directamente relacionada con la fecha. Hay probablemente menos turistas al inicio de la temporada, pero el mar no es tan predecible y la actividad puede ser cancelada. A mediados de temporada hay buen clima pero hay muchos turistas y la isla no puede aceptar a muchos turistas en un mismo momento. Finalmente hacia el final de la temporada, puede haber problema por un tifón. Esto es en una forma muy general y no debe tomarse como regla.
  • Es muy importante hacer una reservación en uno de los pocos minshuku locales o en las areas de campamento (información en el centro de turismo de la isla) para poder desembarcar en la isla. Las reservaciones deben hacerse con algun tiempo de anticipación. Nosotros las hicimos con 2 semanas de anticipación. Hay personas que las hacen mucho mas temprano, especialmente para la temporada pico. En la isla no hay muchas personas que hablen inglés o español, así que la reservación deberá hacerse en japonés.
  • Es probablemente muy prudente hacer al menos dos reservaciónes para nadar con delfines por si hubiera mal clima, sería una lástima viajar tan lejos y perder la oportunidad.
  • Estar muy pendiente de los pronósticos del clima.
Los servicios que nosotros utilizamos fueron:
Todos fueron excelentes y se los recomendamos de manera especial.

Las fotos finales

El gato favorito de Mikurajima


Vista de la convexa isla de Mikura desde el barco que iba dejando una blanca huella sobre la superficie del mar

Algo que solo se puede ver desde el mar...


Gracias por vijar a Mikurajima con el blog. Espero que haya sido un viaje interesante y siento mucho las pausas entre entradas. (終)

 
 

Sumersión parte 5 ("Yo" tambien soy Mikurajima)

Tratar de capturar Mikurajima en unas horas es sin duda imposible, pero es mi deseo que los apuntes escritos en el blog, sean como trazos de un pincel para que el lector pueda llevarse consigo una imagen, si tan solo mas clara, de lo que es esta encantadora isla.    
Mikurajima es mas que sus atracciones turísticas; esos divertidos delfines que empujan a las tortugas y que dejan sin aliento a los turistas.   Es mucho mas que eso, pero en vez de describir con palabras que es lo que abarca, voy a aprovechar la astucia del amable lector.    Espero que a través de la lectura de los apuntes de esta entrada, pueda el lector pintar en su mente,  una imagen mas rica de lo que es Mikurajima.   Sin duda, el lector puede llegar mas lejos con su mente, que yo con mi habilidad para escribir.
Hasta ahora hay un elemento de la isla que había sido relegado a un papel secundario en entradas anteriores.   Me había referido muy poco al lugareño de Mikurajima, pero en esta entrada, pasa finalmente a ser el protagonista de las pequeñas historias que detallo a continuación.  

Estoy aquí
Cuando surgio la oportunidad de dar una vuelta por la isla para conocer los alrededores, uno de los lugareños nos ofrecio llevarnos en su vehículo hasta un punto cercano a un mirador de la isla.   Pudimos haber ido caminando, pero nos advirtió que serían un par de kilometros caminando solamente cuesta arriba.   Como no somos muy rogados (jaja) y porque el iba a ir en esa dirección de todos modos, nos subimos al vehículo.    Al inicio del camino, en la entrada de la montaña, nos enseño la siguiente estructura:


Esta, cumple dos funciones:  primero, es un altar al dios o dioses de la montaña y segundo es una forma de decirle a los demas "aquí estoy".   Esta señal consiste en dejar algunas hojas bajo unas piedras.  Si llegara a ocurrir algún desastre, algún accidente o alguien no regresara (desaparecido), se puede saber facilmente donde buscar a esta persona ya que hay un pequeño altar, en cualquiera de los caminos que suben a las diferentes montañas.   
Antes de entrar al camino de la montaña, el señor que nos llevaba hacia el mirador, puso unas hojas bajo la piedra y empezamos de esta manera nuestro ascenso.
Quizás no es costumbre única de esta isla, pero es primera vez que la veo y no sé de otros lugares en donde se utilice.    
Esperando
Camino de regreso (cuesta abajo :)), todos los conductores que subian nos preguntaban si estabamos bien.   Nosotros nos preguntabamos si lo hacían porque que no es muy común caminar por esa carretera o porque nuestra cara nos delataba como no lugareños.   Los conductores que iban hacia abajo, paraban sus vehículos y esperaban que nos subieramos automaticamente al vehículo y por eso, se extrañaban mucho cuando les respondíamos que queriamos caminar de regreso.   Mientras seguiamos caminando un carro que venía hacía abajo paso sin detenerse.   Bromeando, dijimos que lo mas seguro era que, no era lugareño, ya que todos los anteriores habían parado sin falta.   Mientras caminabamos por las angostas curvas de esa parte del camino, ibamos tratando de buscar serpientes que se dejaran fotografiar, pero todas huían tan pronto escuchaban el ruido de nuestros pasos.   Luego de unos 10 minutos de caminar, nos sorprendimos cuando el vehículo que habia pasado sin parar, estaba estacionado en una parte ancha del camino mientras el conductor, sentado en una piedra grande, disfrutaba del paisaje.   Al vernos regresó a su vehículo y nos invitó a subirnos para regresar.   De seguro, no había parado porque no había podido pero al igual que los demas, esperaba llevarnos de regreso.   Nos sentímos mal en rechazar su amabilidad y su paciencia al esperarnos.    Sin embargo a él no parecio molestarlé, pero si le causó un poco de curiosidad y para no desperdiciar aquél encuentro, aprovechó para platicamos unos minutos sobre la isla y nos contó sobre el agua potable del lugar: naturalmente pura y abundante.   Antés de irse, nos animó a seguir adelante con la caminata, y con una sonrisa se despidió.     
Yo tambien tengo
El guía que nos llevo a la cansada caminata hacia el estanque llevaba un casco dentro del carro, al igual que lo hacia el señor que nos llevó con su vehículo al mirador.    Me parecio extraño, la verdad.

Confianza
El hecho de ser una pequeña comunidad, donde la gente se conoce bien, nos hizó espectador de algunas escenas interesantes, como la siguiente.   Cuando terminamos de usar los trajes isotérmicos para la actividad con los delfines, nos dijeron no había necesidad de llevarlos de regreso, con era suficiente que los dejaramos colgados en la lavandería de la casa donde pasamos la noche.   La confianza que se tienen es la llave que usan los guias del tour para  poder entrar a la casa y recoger los trajes, aún si no hubiera nadie ahí.
Varios trabajos
Algo que nos contaba el señor que nos llevó al mirador, es que en Mikurajima muchas personas tienen mas de un trabajo.   Ya sea porque su trabajo principal depende de la temporada o clima (cultivar, tour de delfines, etc) o porque su trabajo solo necesita invertir algunas horas al día, por lo pequeño de la población (en el caso de comedores); la gente de Mikurajima no es de los que se quedan desocupados.   Y aunque no preguntamos durante el viaje hacia el mirador, fuimos testigos de varios trabajos que hacía nuestro conductor (en un mismo día).  
Me parecio excelente, pero en realidad muchos japoneses en otras áreas, tambien comparten esta cualidad de laboriosidad.   Entonces, si no es una cualidad exclusiva de los lugareños de Mikurajima, ¿por qué lo escribo?    La respuesta a esto, la tuve en el momento en que abordaba el barco para regresar a casa.  Resulta que el "extraño" casco que tenían algunas personas, lo usan en uno de sus trabajos temporales y este es ayudar en el muelle cuando llega un barco con nuevos visitantes y llevarse a aquellos que concluyen su aventura.
Al igual que los aventureros que abordan el viaje de regreso a casa, esta historia ya tiene un pie en el barco que nos lleva al fin de la serie.   La próxima es la última entrada sobre Mikurajima y serán las recomendaciones para los futuros visitantes a la  isla.   (つづく)

 
 

Una pausa para recordar

Una pausa en las entradas regulares para honrar a las victimas y los sobrevivientes de los ataques atómicos contra las ciudades de Hiroshima y Nagasaki.   

Hiroshima - (lunes) 6 de agosto de 1945

Nagasaki - (jueves) 9 de agosto de 1945

 
 

Sumersión parte 4 (Los alrededores de Mikurajima)

Despues de comer un poco, recuperamos las fuerzas y el aliento, ya estabamos en condiciones de salir a caminar en la naturaleza de Mikurajima.   Hay muchos lugares a los que se puede ir dentro de la isla.   Sin embargo, para poder disfrutar de algunos puntos es necesario hacer una reservación con un guía de local.    Luego de pensarlo por un tiempo escogimos un punto al que podiamos viajar solos y otro punto en donde era necesario viajar con un guía.   La caminata  con reservación del guía, la hicimos, calculando que nos diera tiempo de terminar el tour y unos 30 minutos despues, pudieramos subirnos directamente al barco de regreso a casa.

Fué entonces que el primer viaje lo hicimos bastante cerca.  Solamente a unos minutos de donde nos hospedamos.   Era una ruta corta en una montaña, en donde se podian visitar unos arboles antiguos, de la localidad.   El camino de ida fue un poco duro porque el calor húmedo que hizó ese día, parecía estar atrapado dentro del bosque, y como era montaña, la primer parte era solamente en subida.... los grupos de gradas parece que tienen una o dos gradas mas, que el grupo anteiror.   Un poco cansado...   Una vez se acabaron las gradas, econtramos un area circular con arboles muy grandes y anchos.   Aquí descansamos un poco, aprovechando que la temperatura era un poco baja que al inicio y que soplaba un aire muy fresco.    Ahh, el olor a naturaleza, arboles, lodo, hojas secas, etc, eso es vida.    Creo que se puede relajar uno aquí mas fácil que en cualquier otro lado.



Para el segundo viaje fuimos mas adentro a la isla,  a una caminata ecológica que termina en un estanque.    Caminamos 546 metros en mas o menos 1 hora.   Nos tardamos mucho, por las condiciones del camino,  gradas al inicio, veredas angostas, pequeños rios, arboles que bloquean el camino y ademas escalando grandes piedras para avanzar.   Cuando llegamos estuvimos encontramos el estanque rodeado por montañas en todas las direcciones y mientras descansabamos un poco escuchando algunas anécdotas del guía y los ruidos de la fauna local.   El guía (el mismo que agarro la serpiente) nos contó que antes, la gente llegaba bastante gente a nadar.   Ahora por alguna razón, son pocos los nadadores.      


Una hora caminando de regreso y finalmente estabamos por llegar al final.     Como todo final, estaba recordando algunas cosas interesante de Mikurajima..... (つづく)